“Pedir la luna”, “pedir peras a un olmo”: sinónimos de pedir un imposible.
Resulta imposible cuando se calcula, cuando se mide, cuando no se confía.
Cuando la persona permite actuar su interior se actualizan sus capacidades, potencias, fuerzas, etc. que son imparables: hacen posible lo imposible.
Tenemos un interior que es intangible, invisible, inmaterial, y lo que de él sale de él; por ejemplo, amar: el cómo, cuándo, dónde, a quién amo sí que es tangible, visible, material con los actos de amor, de estimación que tienen su modo, su momento, su lugar y la persona u objeto a quien se dirige.
La tradición de los Reyes Magos ha generado la costumbre de organizar la Cabalgata de los Reyes Magos ¹. Sin la Carta a los Reyes Magos ² perdería el encanto, la magia y el revulsivo que son Los Reyes.
Todos -abuelos, padres, hermanos, familiares, vecinos, profesores, etc.- independientemente de las creencias, estado, condición … nos ponemos de acuerdo para entrar en este mundo mágico, inocente, sin juicios, de la ilusión y de lo imposible de la persona que todavía no ha desarrollado completamente su uso de razón.
MAP ayuda a visualizar el interior de la persona, lleno de capacidad, potencia, fuerza. Consigue hacerse ver cuando no hay frenos, ni ataduras, ni cálculos; para esto son necesarias la ilusión y la imposibilidad.
Uno de los recursos que utilizamos es Escribir la carta a los Reyes Magos.
Es una carta difícil.
La recomendación inicial es fecharla cuando la persona tendrá 18, 27, 36, 45, 54, 63, 72, 81, 90 ó 99 años.
¿Qué hay detrás de esta fecha? A lo largo de la vida, que es dinámica, van surgiendo nuevos quién soy que concretan lo que se tiene que hacer; si la persona no toma las riendas de su vida, en lugar de ir dónde quiere resulta que la llevan (y en muchas ocasiones no es donde quería ir).
La propuesta de la Carta a los Reyes es una mezcla de realidad y de sueño.
Realidad, al tomar consciencia de cómo previsiblemente va a ser mi situación personal y la de mi entorno cuando tenga 18, 27 … 99 años.
¿Seguiré siendo estudiante, trabajador? ¿Estaré sin este compromiso o con estas cargas familiares, o estaré sin cargas familiares al haberse emancipado los hijos, o con las cargas de abuelo/a, o con las …, o sin los …?
Sueño, al visualizar cómo quiero que sea mi vida y mi entorno cuando tenga 18, 27 … 99 años.
¿Seguiré con el agobio de los exámenes, o de rendir cuentas o de cumplir objetivos profesionales …? ¿Continuará mi entorno con hijos adolescentes?, ¿Estarán mis cargas hipotecarias?, ¿Seguiré, continuará, estarán …. mi …, mis …?
Realidad y sueño concretados en los distintos ámbitos: personal, familiar, profesional, social, espiritual, cultural, deportivo, político, hobbies, etc.
La integral de estas realidades y sueños sitúan la persona en un horizonte, en una ubicación, en una situación, con una proyección madura de cuando tenga 18, 27, …99.
Ciertamente, la imaginación está presente, pero con una precisión clara y concreta que permite acertar el tomar decisiones.
Por cada sí acertado, se ahorran un sinfín de noes; cuando se ha escogido realizar unos determinados estudios que capacitan profesionalmente ya no están presentes otros estudios en los que también se está capacitado, sin necesidad de renunciar a ellos; sencillamente, se ha elegido. Esta concreción en la orientación profesional se puede, se tiene, que aplicar en cada ámbito: personal, familiar, … etc.
¡Menudos deberes que se plantean con esta Carta a los Reyes!
En todas las peticiones en la Carta a los Reyes siempre tienen que estar presentes dos ingredientes: la ilusión y la imposibilidad.
Y cuando se redacta, conviene redactarla como la redactan los niños, como la redacta el interior de la persona:
“Muy queridos Reyes Magos; ya sabéis que me he portado muy bien, y por esto os pido que me traigáis …. “
Y se anima a pedir cosas ambiciosas: si pide un caramelo, se le sugiere que está muy bien la petición …, pero puede y debe pedir algo más inconcebible, ilusionante y que sea inimaginable, imposible.
Y si pide una cosa esencialmente imposible, se le ayuda a tocar la realidad, compatible con la ilusión y la imposibilidad.
Y también se advierte: “si no te portas bien … ¡Te van a traer carbón!”.
Y hay que portarse bien, siempre, aunque no haya relación lógica entre “comer, ir a dormir, lavarse los dientes, hacer los deberes …” con los regalos que ha pedido; “si no …, ¡Van a traer carbón!”.
Es una carta difícil.
Es un enfrentarse con la realidad a medio plazo que facilita la toma de decisiones.
Decisiones que en muchas ocasiones son costosas al sacarnos de nuestra zona de confort.
¿Te atreves a hacer la Carta a los Reyes?
Si quieres mandármela, como buen paje, aseguro que la recibirán.
¹La Cabalgata de Reyes Magos es un desfile de carrozas típico en las ciudades de España y Andorra, en Gibraltar y, con menos eco, en poblaciones checas, polacas, mexicanas y en la localidad portuguesa de Monção, en el que los Reyes Magos (Melchor, Gaspar y Baltasar) y sus pajes y ayudantes lanzan caramelos y golosinas a los niños en la víspera de la fiesta de Epifanía. Las cabalgatas se celebran cada 5 de enero por la tarde o al atardecer, siguiendo la tradición, antes de que los Reyes dejen durante la noche los regalos en las casas.
²En España, la tradición dice que los regalos de Navidad a los niños los traen los Reyes Magos la noche del 5 al 6 de enero. Días antes, los niños deben entregar una carta a los pajes reales; estos pajes hacen de mensajeros y se las entregan a los Reyes Magos. En esta carta, los niños enumeran los regalos que desean y aducen los méritos que han hecho a lo largo del año para ser merecedores de tales obsequios. También es tradición que la noche del 5 de enero los niños dejen sus zapatos en algún lugar de la casa, junto a la puerta o en una ventana; incluso se dejan dulces o frutas para agasajar a los Reyes Magos y agua o comida para los camellos. A la mañana siguiente, en caso de haberse portado bien durante el pasado año, se encontrarán allí los regalos anhelados; por el contrario, en caso de haberse portado regular, hallarán carbón dulce en su lugar (un dulce de feo aspecto pero golosina, al fin y al cabo) y, por último, en caso de haberse portado mal, pueden encontrar directamente carbón.